jueves, 29 de agosto de 2013

ME PREGUNTO POR QUE



¿Por qué siempre me equivoco en cortar las rosas en la época equivocada?

¿Por qué pienso en ella cuándo ella le sonríe solo a el?

¿Por qué me invade la tristeza de no tenerte y no poder amarte?

¿Por qué espero su voz todas las mañanas y ella ni siquiera me habla?

¿Por qué espero sus ojos si ella nunca me mira?

¿Por qué siempre cometo los mismos errores cuando me siento derrotado por el amor?

martes, 27 de agosto de 2013

FOBIA SOCIAL



No creas que he vuelto para vengarme de ti,
he regresado por mí mismo,
con los mismos fantasmas y miedos de siempre...
Pero esta vez, con la esperanza de ignorarte,
porque sé que siempre el dolor va estar en mi,
y en ti la malicia de destrozarme como coyolobos endemoniados
que buscan su comida desbocados por la furia del hambre...
Lo que me hiciste no tiene perdón
 y aun así te quiero...
y aun así te espero...
Aunque sé que nunca llegarás a besarme, a decirme te quiero.

domingo, 25 de agosto de 2013

TOC

El poeta estadounidense Neil Hilborn conmueve con su poema de amor titulado TOC (que son las siglas de Trastorno Obsesivo Compulsivo, enfermedad que él padece).
En el poema, recitado durante la final del concurso de poesía de Rustbelt, Hilborn describe una imagen dolorosa pero hermosa de lo que significa tener una relación y el TOC.
La sentida composición de Hilborn llegó a las redes sociales convirtiéndose en viral inmediatamente. Allí varios internautas lo felicitaron por su performance, algunos hasta llegaron a calificar como inspirador su poema.
El artista explicó que escribió este poema en el 2011 y que si bien la mayoría de los tics que se ven durante su exposición son intencionales, algunos también son reales.
El poema: “TOC”
La primera vez que la vi…
Todo en mi cabeza se silenció
Todos los ticks, las imágenes constantes desaparecieron.
Cuando tienes trastorno obsesivo compulsivo en realidad no tienes momentos callados.
Incluso en la cama estoy pensando:
¿Cerré las puertas? Sí
¿Me lavé las manos? Sí
¿Cerré las puertas? Sí
¿Me lavé las manos? Sí
Pero cuando la vi, la única cosa en la que pude pensar fue en la curva de la horquilla de sus labios.
O la pestaña en su mejilla–
La pestaña en su mejilla–
La pestaña en su mejilla.
Sabía que debía hablar con ella
La invité a salir seis veces en treinta segundos.
Ella dijo que sí después de la tercera,
pero ninguna de las veces que pregunté se sintió bien así que tenía que seguir haciéndolo.
En nuestra primera cita,
pasé más tiempo organizando mi comida por colores de lo que pasé comiéndola o hablando con ella.
Pero le encantó.
Le encantaba que tuviera que besarla para despedirme 16 veces, o 24 si era miércoles.
Le encantaba que me tomaba todo el tiempo caminar hacia casa porque había muchas grietas en la banqueta.
Cuando nos mudamos juntos ella dijo que se sentía segura,
como si nadie nos fuera a robar porque definitivamente había cerrado la puerta 18 veces.
Yo siempre veía su boca cuando hablaba–
Cuando hablaba–
Cuando hablaba–
Cuando hablaba–
Cuando hablaba;
Cuando me dijo que me amaba, su boca se curveaba hacia arriba en los bordes.
En la noche ella se acostaba en la cama y me veía apagar todas las luces, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas, y prenderlas, y apagarlas.
Ella cerraba los ojos y se imaginaba que los días y las noches pasaban frente a ella.
Algunas mañanas empezaba a besarla para despedirme y ella sólo se iba porque estaba haciéndola llegar tarde al trabajo.
Cuando me detenía en las grietas de la banqueta ella seguía caminando.
Cuando me decía que me amaba su boca era una línea recta.
Me dijo que estaba tomando mucho de su tiempo.
La semana pasada empezó a dormir en casa de su madre.
Me dijo que nunca debió dejarme apegarme tanto a ella; que todo esto fue un error,
pero… ¡¿Cómo podría ser un error que no tenga que lavarme las manos después de tocarla?!
El amor no es un error y me está matando que ella pueda salirse de esto y yo no.
No puedo–
No puedo salir y encontrar a alguien nuevo porque siempre pienso en ella.
Usualmente, cuando me obsesiono con algo, veo gérmenes escabulléndose en mi piel.
Me veo a mí mismo siendo atropellado por una infinita línea de coches.
Y ella fue la primera cosa hermosa en la que alguna vez me he estancado.
Quiero despertar todas las mañanas pensando en la manera en la que agarra el volante.
Cómo mueve las manijas de la regadera como si estuviera abriendo una caja fuerte.
En cómo sopla las velas–
cómo sopla las velas–
cómo sopla las velas–
cómo sopla las velas–
cómo sopla…
Ahora sólo pienso en quién más está besándola.
No puedo respirar porque él sólo la besa una vez– ¡No le importa si es perfecto!
La quiero de regreso tanto que…
Dejo la puerta sin cerrar.
Dejo las luces prendidas”.


 http://www.dominiomental.com/el-poema-de-amor-de-un-hombre-obsesivo-compulsivo

lunes, 12 de agosto de 2013

SOLEDAD

La solución no se ve en el horizonte.
Me imbuyo en la desesperanza y el dolor.
He estado solo por mucho tiempo.
La nieve, azota con fuerza en mi cara.
Mientras,  pienso en la mujer que no me ama.
El horizonte es gris y no sé porque camino hacia la nada.
Soy un esclavo de la Soledad,
un esclavo de amores no conseguidos.
Un esclavo de mis celos hacia el hombre que ella ama.
------------------------------------------------------------------------------
Como duele estar solo
Como mata la Soledad.
Escarnio obsceno que recorre mis venas
destructora  de mi integridad.
Solo queda una solución,  para salvarme…
Algunos le llaman Esperanza…
Yo la llamo Natalia..

viernes, 9 de agosto de 2013

CULPA



Le acaricie una mano, un brazo que toque dos veces.
Intercambiamos unas palabras.
Nunca más la vi.
Siento culpa.
No se si porque ella tenía dieciséis años
o porque nunca le dije te amo.